domingo, 28 de noviembre de 2010

¿Feliz? Navidad

Queridos Reyes Magos:
Es difícil saber por qué existe la Navidad, por qué todo el mundo la celebra, sea creyente o no. Es difícil saber por qué me gustan estas fechas tan nostálgicas...

Cuando cierro los ojos y pienso en la Navidad me imagino abrigada, con un gorro, unas orejeras peludas, con unos guates y bajo una nieve fría. Pero también me imagino rodeada de los brazos de un desconocido, corriendo, riéndome con él... Me imagino una felicidad, un milagro...

Pero después de todo eso pienso, pienso que quizás, la Navidad me guste por otra razón. Quizás si vuelvo a cerrar los ojos, recuerdo los cinco o seis regalos bajo mi zapatilla al lado del árbol, bajar las escaleras de casa de mi abuela y ver el portal lleno de paquetes, una mañana con chocolate y roscón después de abrir todos los regalos con una sonrisa y a la espera del detalle del roscón que siempre mi abuelo conseguía para mí.

Y quizás esto todo me haga más feliz que lo anterior. Al fin y al cabo la Navidad está ahí con la única excusa de juntar a las familias, de recordar los tiempos en que no faltaba nadie, o tiempos en los que faltaban muchos.

Porque, queridos Reyes Magos, a veces lo importante de la Navidad sólo es que tenemos esas pequeñas cosas, esas sonrisas de la noche del 24 de diciembre, ese familiar que nunca acaba las uvas y esas ganas de desayunar el día seis de Enero mientras los más pequeños disfrutan con sus juguetes...

Por eso estas navidades no quiero un móvil de última generación, un flash muy potente, un objetivo maravilloso o un ordenador portátil nuevo; estas navidades sólo deseo que todo siga como siempre, quiero a los niños sonriendo y gritando la mañana de reyes, quiero sentarme a escuchar las anécdotas del tio pesado la noche del 24 al 25, quiero comer las uvas rodeada de mi familia; porque la fiesta, el dinero, es lo de menos.

Lo que quiero, queridísimas Majestades, es que la ilusión de las navidades no se acabe nunca, para nadie.

Esperando un año más que me traigáis todo, a cambio sabéis que contais con las copas de champán para vosotros y los platos de lehe para los camellos...No se me olvidarán las pastitas...

Un beso muy fuerte.

Alba.

jueves, 25 de noviembre de 2010

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Tengo una página en blanco, muchas cosas que decir y sin ganas de contarlas...y unos escasos cinco minutos para expresar algo que parezca bonito... Y es que si a hablar se aprende hablando y a caminar, caminando; a escribir solo se aprende leyendo.

Y yo acabo de leer un post de un amigo que ha merecido demasiado la pena, como para ahora estropearlo escribiendo yo algo...pero bueno, como no creo que nadie lea los dos juntos puedo arriesgarme a que un rallón cibernético ensucie vuestras pantallas un poquito... y si os cansais, me lo decís que yo paro...

Haciendo referencia a mi anterior post, solo diré una cosa, me corté el pelo. Me lo corté y me hice mechas... ironías de la vida, mi vida está más como antes que nunca... La persona que no debía estar, no está. La persona que yo deseaba con todas las fuerzas que volviera, ha vuelto. Y el resto de gente que me ha demostrado tanto en tan poco tiempo, aún no se ha cansado de mi.

Y cambiando de tema, o simplemente dejando los pelos en la peluquería, sólo quería estar aquí una vez más, ser capaz de que mi mente se abriera a vosotros, como tiempo atrás... Que mi mente me dejara decir tantas cosas... Pero una vez más es imposible y después de mil vueltas no logro decir nada...

Y por último haré lo que hacen en los telediarios, al fin y al cabo, intento ser periodista en mi tiempo libre...Os daré la noticia del día. Hoy llueve. Hoy llueve, y ayer estuvo todo el día lloviendo...Gente, tengo que decir, que las noticias del día deberían ser otras...


Y no olvideis...Hoy llueve, mañana Dios dirá.

Alba.